
Una película que
debe esperar y cuando llegue a las carteleras debe evitar verla. O no. Un
recorrido por la infidelidad para entender si puede conducir al suicidio, si la
fidelidad es condición para el amor, si el dolor vive en el amor o en el
desamor. Y siempre una ventana para mirar el mundo tras los cristales. No deja
de ser una película romántica y aún así, duele. Suficiente razones para esperar
el filme con ansiedad y luego pensar si el amor vale la pena.